Psicologueando

Hay una fina línea divisoria entre ser un trabajador y ser una  persona tóxica.El trabajador asume su rol en la sociedad,aunque  este  sea ser la oposición,con entusiasmo,con optimismo,con fe. En cambio la persona tóxica es deprimente,no asume su rol en la  sociedad y más aún no tolera las críticas. Pero antes de hablar de esto definamos los roles.Mejor aún,antes de definir los roles definamos que tipo de actitud tenemos frente a la vida. Porque si no estoy bien conmigo no voy a estar bien en   ningún lado de la sociedad.Todo es cuestión de actitud. La persona tóxica confunde el entusiasmo con falta de seriedad. Como si ser depresivo fuera ser serio.Recientemente un antropologo  español dijo : La vida no puede ser trabajar de lunes a viernes y   el  sábado ir al supermercado.Es deprimente.Pero es serio. Probablemente ustedes le encuentren otras cosas atractivas a la vida Que este hombre seguramente pasó por alto debido a que ha sido  educado con éxodo 20-9

Me gustaría comenzar con una frase de Federico Andahazi: "Es importante la creación del enemigo" Para de allí partir hacia la creación de la media naranja. Ambas caretas son la dupla indispensable del teatro de la vida y también de una psicología no neurótica,por el contrario,una que acepta la ambigüedad. Lo que desearíamos que fuera cierto y la realidad pueden contrastar y la utopía puede se desecha por una distopía. Esto da lugar en el teatro de la vida a las mascaras con la sonrisa y con el disgusto que termina un un tercer acto que denominamos " los trapos" o el malestar. En la psicología de Jung las cosas gustan o disgustan. En la vida,en el teatro,en la literatura,el arte, también. Procesar esta información para la psicodinámica de Jung es en cierta forma un aprendizaje significativo donde las personas categorizan ,analizan y manipulan ideas y realizan juicios , no solo gustan de algo sino que hacen juicios de porqué les gusta. Entienden. En